Una compañera viajó de Virginia a California a un curso por 5 días y de regreso. Le mandé un correo para preguntarle como había estado el curso y comentó que fantástico pero que por el cambio de horario se sentía mal, esto le llaman en Estados Unidos «Jet Lag» y es muy común después de un viaje largo en avión.

Le sugerí hacer la rutina diaria para balancear sus energías, incluyendo «Conectando el Cielo y la Tierra», y «La Postura de Wayne Cook» para después trazar con las manos los meridianos siguiendo el flujo de éstos. (Ya platicaré esta técnica en otro artículo). A la media hora me escribió diciendo que se sentía normal y me agradeció el consejo. Lo anterior podría ser una historia por sí sola pero en este caso fue sólo el comienzo.

En la noche había una reunión y después de un rato de estar conviviendo me comentó que no le gustaba «Trazar Meridianos» porque al llegar al meridiano de la vesícula biliar sentía mucho enojo. Inmediatamente mi mente comenzó a dar vueltas en una búsqueda en los archivos de medicina china… El meridiano de Vesícula biliar e hígado están relacionados con el elemento «Madera» y la estación primavera. Interesante… Estamos en primavera. Algo todavía mejor es que el elemento Madera y por ende los meridianos anteriores están relacionados con la emoción «Enojo». Todo tiene sentido.

Le platiqué esto y me comentó que hace años tenía esa emoción pero que había trabajado para eliminarla. Mmm Me pregunté si la emoción había sido procesada y por ende liberada o si seguía atrapada en el cuerpo-energía de ella. La respuesta era simple todavía había trabajo por hacer.

Sin más que decir comenzamos una «mini sesión».

Comenzamos con balancear las energías básicas haciendo «La Rutina Diaria» y algunos ejercicios de lo que llamamos «La Rutina Diaria Plus» para después enfocarnos en las emociones. Liberamos enojo con el sonido «Shhhhh», utilizamos el ejercicio de «Expulsando el Coraje» (expelling the venom) que será publicado este mes de Mayo para después balancear los meridianos en cuestión.

Wow… Mis manos estaban «hirviendo» como hace mucho tiempo no sucedía. Había tanta energía «antigua» no fluyendo que tomó varios minutos liberarla y por ende mis manos regresar a temperatura normal. Después nos enfocamos en permitir que la energía fluyera en su cuerpo lo mejor posible para ese momento y mejoramos su conexión con la tierra.

Al terminar la sesión ella simplemente se quedó sentada por varios minutos, volteaba y veía las paredes y el piso, no cabe duda que estaba en un estado «no lineal» lo que me indica que habría cambios profundos. Decía que ella pensaba que todo ese enojo no estaba ahí sin embargo sintió como se iba liberando con el paso del tiempo durante la sesión. Comentó que no se había sentido así en muchos años, se sentía ligera y liberada. En mi percepción se veía radiante y sus ojos tenían esa chispa que en ocasiones se ve después de curaciones especiales.

Ella practica Tai Chi y yoga diario (lleva más de 10 años haciéndolo). A la semana siguiente recibo un correo dándome las gracias por la sesión recibida y los cambios tan trascendentes que habían traído. Ha estado Trazando los Meridianos diario sin tener ese sentimiento de enojo que le causaba el trazar el meridiano de la vesícula biliar. También me comenta que al hacer su rutina de Tai Chi esta sintiendo el flujo de energía por todo su cuerpo y que se siente como nunca.

Simplemente, su cuerpo necesitaba un empujoncito para comenzar un ciclo de evolución muy importante.

Me siento honrado de haber sido el conducto para esa transformación en su vida