Hace más de 16 años cuando comenzamos a estudiar los diferentes sistemas energéticos a través de multiples modalidades, nos dimos cuenta que cada una de ellas nos iba proporcionándo diferentes herramientas para balancear los sistemas y que una herramienta determinada o ejercicio específico no necesariamente funcionaba para todas las personas o no daba el mismo efecto en la misma persona todo el tiempo. A veces los resultados eran inmediatos y significativos otra veces los resultados tomaban bastante más tiempo.
En ese entonces creíamos que estos sistemas a veces tomaban tiempo en balancearse pues el individuo, tal vez, necesitaba pasar por un proceso de sanción y había posibles limitaciones que prevenían que los cambios fueran más rápidos. Mientras en ciertas ocasiones los procesos son importantes, y es fundamental hacerle caso a lo que el cuerpo nos indica, ahora creemos que en la mayoría de los casos en los que los sistemas se regresan a patrones no saludables, es el cuerpo pidiendo atención a un nivel más profundo para liberar emociones o situaciones incrustadas en nuestro sistema que ya no sirven su propósito. En estos casos, uno debe entrar más profundo con herramientas avanzadas para mejor entender qué está pasando y encontrar la raíz del ese comportamiento energético que puede tener años en nuestro sistema energético, logrando así liberar ese patrón generalmente para bien.
Para una transformación mas rápida y duradera, nuestra labor como guías de transformación es convertirnos en detectives energéticos, evaluar los diferentes sistemas y descifrar el origen del desbalance, a su vez, enseñando patrones saludables de comportamiento energético y ejercicios para reforzar y mantener este nuevo estado.
En este nuevo paradigma, los ejercicios energéticos toman un lugar fundamental para cimentar los cambios establecidos en las sesiones. Los cambios deseados ocurren mucho más rápido y, en la mayoría de los casos, de manera definitiva, permitiendo así, continuar con la transformación energética de otros sistemas y poder entrar a niveles más profundos durante las siguientes sesiones.
Cuando uno comienza el camino de la transformación energética para establecer patrones sanos que soportan una vida saludable y plena uno se enfrenta a varios retos:
- ¿Dónde empezar?
- ¿Cómo saber qué sistemas necesitan atención?
- ¿Cómo saber cuándo se ha establecido un patrón saludable estable?
- Después de que los sistemas en los que estábamos enfocados están balanceados, ¿Cuáles sistemas energéticos necesitan ahora atención?
Para contestar estas y otras preguntas fuimos generando, a través del tiempo, lo que ahora llamamos el «Perfil Energético Personal». Este perfil es una matriz listando los sistemas energéticos y el tiempo organizados de una manera específica para permitirnos analizar el estado actual de los diferentes sistemas, y mostrar los cambios que se han ido acumulado desde el análisis anterior. El Perfil Energético también nos proporciona un mapa que nos sirve como guías para los clientes y alumnos durante el proceso personal de transformación.
El Perfil Energético incluye diferentes dimensiones. Al principio el perfil está enfocado en sistemas, flujos y conexiones fundamentales, una vez que éstos son balanceados, el perfil nos guía a analizar el estado energético en mayor detalle y nos da la flexibilidad de adaptarlo a las necesidades del cliente. Un perfil completo puede incluir cientos de elementos listando flujos, conexiones, elementos físicos, químicos, sistemas energéticos, etc.. También hemos creado perfiles para otros aspectos de nuestras vidas (financiero, social, laboral, etc.) pero ese tema lo dejamos para otro artículo.
Cuando estaba enfermo comenzamos con un sistema simplificado en el cual probábamos el estado de mis energías 3-4 veces al día. Afortunadamente con los conocimientos que tenemos ahora podemos ayudar a que el cuerpo logre un balance energético que dura más tiempo permitiéndonos distanciar estas pruebas.
El Perfil Energético se ha convertido en una herramienta fundamental en nuestro repertorio para medir objetivamente cómo el cuerpo se va balanceando a través de los ejercicios y sesiones profundas para lograr una transformación en los diferentes aspectos de nuestra vida.