Un compañero y amigo del trabajo me comenzó a platicar a cerca de su hija que llevaba 1 semana vomitando todas las noches. Ya había ido al doctor 2 veces y le habían comentado que «no había nada mal con ella». Con un poco de indecisión me decidí a comentarle lo que hacíamos con la energía y me ofrecí a ayudarlo. Le platiqué de Donna Eden y de los ejercicios de Medicina Energética incluyendo La Rutina Diaria,  la teoría básica de medicina china, los meridianos y los 5 elementos y de cómo podría ser una opción alternativa para tratar de solucionar lo que le pasaba a su hija.

Habló con su señora y decidieron que no había nada que perder. Esa noche fuimos a su casa y comenzamos a probar energéticamente a la niña. Fue una experiencia super interesante ya que la niña sólo quería jugar con Klau y no «ser tratada». Klau jugó a «las cosquillas» para probar las conexiones entre los diversos elementos, y con diversos juegos fuimos probando los sistemas y conexiones.

Encontramos varios desbalances su sistema que balanceamos «jugando» haciendo los ejercicios de la rutina diaria. Después encontramos lo que creemos que estaba más relacionado con esto que era un desbalance en el meridiano de vesícula biliar y la conexión entre el elemento de «Madera» y el elemento «Tierra».

Balanceamos los sistemas y conexiones y nos despedimos. No oí nada al día siguiente, ni al día que siguió. La curiosidad me ganó y fui a preguntarle qué había pasado. El estaba feliz, su hija no vomitó más y me comentó que a partir de esa sesión también se dejó de hacer del baño en la cama (la niña no mi amigo jeje). El estaba seguro que este cambio se debió al balanceo general que le hicimos.

El aprendizaje de esta sesión fue darse cuenta de la importancia de poner atención a lo que nos pasa en relación con la hora en que sucede y utilizar esa información para comenzar la búsqueda de desbalances energéticos.

Otra lección importante es recordar que muchas veces los beneficios de una sesión generan cambios positivos en otras áreas que tal vez uno no esperaba y tal vez no estén directamente relacionados con lo trabajado. Fascinante.

Desde entonces nuestros amigos creen en «la energía» y cuando surge el tema en el trabajo no duda en comentar esta experiencia con los demás.